Según la Real Academia Española (2014) colaborar es “Trabajar
con otra u otras personas en la realización de una obra.”. Parece un concepto muy
simple y cualquiera, pero si te atreves a intentarlo, podrás ver que no es tan
sencillo. Colaborar implica respeto, honestidad
y confianza. Es imposible trabajar con alguien por el cual no sientes al menos
estas tres cosas. O bueno, puede que no sea del todo imposible pero sin duda será
mucho más difícil llegar al objetivo. Trabajar en equipo se complica aún más
cuando la totalidad del contacto entre los integrantes se realiza en la web y
el trabajo es algo que normalmente se hacía individualmente. Al trabajar
individualmente tú eres el jefe de tu tiempo, tú lo asignas como se te da la gana
y se acabó. En un equipo es esencial el manejo de tiempos, todos somos
diferentes y preferimos ciertos días y ciertas horas para trabajar. Existe una
gran probabilidad de que las horas que tú elijas para trabajar generaran conflictos
con las elegidas por los otros integrantes del equipo. Esto fue lo más
complicado de mi semana de trabajo. Durante el semestre me acostumbre a trabajar
domingos por la noche y martes por la mañana. Para ajustarme a los
requerimientos del equipo tuve que hacer la mayor parte del trabajo en lunes,
cosa que me desoriento un poco. De ahí en más, el trabajo fluyo excepcionalmente,
considero que todos los integrantes trabajamos con un objetivo en común y eso
se reflejó en los avances presentados. Creo que los avances, que son mayores a
los requerimientos para esta semana, son suficientes para poder entregar un producto
de calidad al final de estas tres semanas.
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